El cáncer implica el crecimiento rápido e incontrolable de células anormales. Es una de las principales causas de muerte en todo el mundo y puede controlarse en cierta medida con quimioterapia y otras terapias. El cáncer puede originarse en casi cualquier parte del cuerpo y propagarse a otras áreas, causando alteraciones en las funciones corporales normales.
Las mutaciones genéticas son la causa principal de diferentes tipos de cáncer. Pueden ser hereditarias o estar causadas por factores ambientales. Estos factores, también llamados carcinógenos, pueden incluir la exposición a la luz ultravioleta, el tabaco, el alcohol, la inhalación de asbesto y la infección por patógenos.