Los anticoagulantes impiden que la sangre se coagule con la misma facilidad o rapidez habitual. Si ya ha tenido un coágulo sanguíneo, se utilizan para evitar que este se agrande. Si corre el riesgo de desarrollar coágulos sanguíneos, se utilizan para prevenir su formación. El tratamiento puede durar desde unas pocas semanas hasta el resto de su vida.
Los anticoagulantes se utilizan para tratar y ayudar a prevenir los coágulos de sangre que se producen en los vasos sanguíneos.
Síntomas
Tratamiento
Como parte de su tratamiento, es posible que le receten un anticoagulante. Este es un tipo de medicamento que afecta la sangre. Previene la formación de coágulos. Si tiene un coágulo, un anticoagulante puede evitar que crezca. Sin embargo, dado que los anticoagulantes interfieren con la coagulación, pueden provocar un sangrado incontrolable. Esto puede ser especialmente peligroso si se corta o lesiona. Es importante conocer los peligros asociados con los anticoagulantes para poder usarlos de forma segura.